Un grupo que trabajaba con corticoides reportó que uno de los ensayos –tal vez el más grande del mundo–, llamado Recovery y realizado en el Reino Unido, produjo resultados: “en sus ensayos clínicos, realizados con 4.000 pacientes –2.000 de ellos relacionados con la dexametasona–, dio resultados positivos en la reducción de la mortalidad exclusivamente en pacientes con ventilación o soporte de oxígeno”, explica la profesora Vaca.
La epidemióloga destaca además que lo que demuestra este ensayo es que el uso de la dexametasona “no es para prevenir ni tratar pacientes que estén respirando bien en hospitalización ni con síntomas de COVID-19”.
Dentro de los resultados con este fármaco está la reducción de la mortalidad de cerca del 30 % de los pacientes con ventilación, y una 20 % en pacientes con soporte de oxígeno.
Escuche aquí el programa completo Desde la Botica sobre la perspectiva de la dexametasona en la infección por SARS-CoV 2.